Algo que nos cuesta mucho a los artistas del tatuaje por lo general es saber cuánto cobrar por nuestro servicio.
En mi experiencia personal, cuando empecé a tatuar, nunca me había tatuado con otrx artista. Entonces no tenía siquiera una referencia de cuánto podían llegar a salir.
Iba tanteando según mi necesidad y comodidad del momento. Eso generó que muchos clientes me dijeran que cobraba muy poco.
Después de muchos años de dudas, subas y bajas de precios, cambios de instrumentales y locales, tuve una recomendación: ORDENARME.
Acá te dejo algunos tips para aprender a cobrar tu trabajo.
Cuando uno empieza en este mundo artístico, lo hace desde la curiosidad, el placer y amor. Pero al pasar el tiempo, crecemos a nivel conocimiento y experiencia.
Eso nos lleva a comprar nuevas herramientas, tener nuevos hábitos, una higiene más estricta, más capacitaciones, etc.
No todos empezamos con las mejores máquinas, ni el mejor estudio.
Muchos (y me atrevo a decir que la gran mayoría) empezamos con lo accesible, con lo "básico".
Cuando llega la hora de organizarnos y ponerle precio a nuestro trabajo tenemos que tener en cuenta muchos puntos claves:
1) Qué.
2) Dónde.
3) Cuánto.
4) Precio de las herramienas.
1) ¿Qué le ofrecés a tu cliente?
Nosotros no ofrecemos el dibujo en la piel y ya.
Nosotros estamos ofreciendo una experiencia al cliente.
Estamos ofreciendo higiene, personalización, tiempo, insumos descartables de un único uso y nuestro conocimiento.
HIGIENE.
Partamos de la base de una buena higienización.
Como artistas del tatuaje debemos tener todos los recaudos para que no exista ninguna contaminación cruzada ni directa, ya que abrimos la piel en cada trazo.
Debemos tener aptos nuestros materiales, el lugar (piso, paredes, muebles, TODO), nuestras manos, materiales estériles y descartables.
En otro blog estaremos comunicando la importancia de la buena higiene y las posibles contaminaciones que se puedan generar en un estudio de tatuajes.
PERSONALIZACIÓN.
Hay muchos tatuajes que son la copia de otros tatuajes. Es importante ofrecerle al cliente una personalización del mismo. Darle la oportunidad de crear un tatuaje ÚNICO.
Charlar ambas partes y llegar a un acuerdo. A veces sucede que quiere tal cual está la referencia que nos muestra, y entonces ahí ofrecerle un trabajo anatómico, variando la direción del mismo o que encaje bien en la zona que desee.
TIEMPO.
Un tatuaje lineal puede llevarnos 10 minutos.
O eso es lo que ve nuestro cliente. LLega, se lo hace y se va. NO.
En realidad nos lleva mucho tiempo el antes, durante y el después. Después profundizaremos éste tema.
INSUMOS DESCARTABLES Y HERRAMIENTAS.
Los tatuadores DEBEMOS usar agujas/cartuchos de un solo uso por obligación. Dependiendo de la máquina que tengas en este momento, se usan cartuchos o agujas de varilla con punteras descartables.
Existen las punteras de aluminio o también los descartables. Yo siempre voy a recomendar que se utilicen los DESCARTABLES, ya que para la esterilización de los accesorios no descartables necesitamos un esterilizador de VERDAD, los cuales tienen un valor elevado al que no todos pueden acceder. No podemos andar arriesgándonos a cualquier contagio, cualquier contaminación cruzada, cualquier riesgo.
Y con herramientas no solo me refiero a la máquina y sus repuestos.
Herramienta también es la mesa, la silla, la luz, la piseta, el apoya brazo, etc.
NUESTRO CONOCIMIENTO.
Sabemos cómo armar la máquina, sabemos cómo armar la mesa, sabemos cómo pinchar la piel. Con la práctica vamos perfeccionando muchos métodos, hábitos, detalles, incluso la manera de comunicarnos con el cliente.
Aparte de conocer las tres capas de piel, nos encontramos sabiendo muchas técnicas para la higienización del espacio, las mejores marcas, cuánto tiempo es el adecuado para la curación de un tatuaje, qué hacer cuando hay alguna infección, qué NO hacer cuando alguien presenta alguna reacción alérgica, dónde desechar los residuos patológicos, etc, etc.
Ya sea que tatuas hace 1 mes o 10 años, el conocimiento está. No es el mismo, pero está.
Quizás hay algunas cosas de las que mencioné que no conocés aún, o quizás incluso mencioné menos cosas de las que ya sabés. Es un constante aprendizaje.
Si la constancia y el respeto hacia nuestro camino como artistas lo mantenemos, el conocimiento crece día a día.
2) ¿Dónde le estoy ofreciendo mi servicio?
Muchos empezamos en nuestra casa, o en la casa de algún conocido. Si estamos en nuestras casas tenemos que generar que esa experiencia sea higiénica y tranquila.
El tatuaje es un momento de vulnerabilidad, donde el cliente está siendo lastimado (con un fin artístico) y a veces con dolor. No podemos ni debemos admitir momentos tensos ni para el cliente ni para el artista. Ambas partes deben estar cómodas.
Ahora si el servicio lo ofrecemos en un local tenemos que tener en cuenta también los gastos de alquiler, luz, transporte, etc.
3) ¿Cuánto tiempo le estoy dando a éste trabajo?
Desde el momento de la consulta ya tenemos varios días de por medio.
Primero viene la confirmación del precio. Luego el diseño, con todos los cambios que éste conlleve.
Después el día del turno tenemos por lo menos 40 minutos de limpieza y armado de mesa (una limpieza adecuada, claro).
El momento del tatuaje que puede ser desde un trabajo de 10 minutos hasta un trabajo de 5 horas.... Luego ¡viene el desarmado!
Tenemos que ofrecer la misma limpieza antes y después. Una vez que se fue el cliente debemos desarmar nuestra mesa de trabajo, descartando lo descartable e higienizando
nuestras máquinas, mesa, silla, apoya brazo, piso, todo. Debemos cuidar el entorno tanto para el cliente como para nosotros.
4) Precio de las herramientas.
Como mencioné hace no muchos párrafos atrás, las herramientas no solo son la máquina y sus repuestos.
En este caso no solo vamos a contemplar el precio de nuestras herramientas de trabajo, también los insumos descartables.
Aparte de todo lo ya mencionado, usamos un montón de productos. Desde la aguja hasta la afeitadora.
Si contemplamos todos los productos usados en cada sesión (ya sea un tatuaje de una sola aguja o uno que lleve 4 medidas distintas) tenemos un mínimo que nos da la BASE de dónde partir con el precio mínimo.
Cuando armes una mesa fijate la cantidad de insumos utilizados.
Te dejo una pequeña lista de referencia: film, campos descartables, butter/vaselina, bajalenguas, tetinas, tinta, agujas, servilletas, film para apoyabrazo/camilla, cubre camilla, guantes, piseta, jabón clorhexidina, agua destilada, alcohol al 70%, diluyente, stencil, hectográfico, descartador de agujas, etc.
A todo eso le sumamos los valores mencionados previamente: conocimiento, tiempo, espacio, higiene.
Yo me ayudaba con un EXCEL, pero hoy existen un montón de aplicaciones que pueden ayudar a agilizar ese cálculo.
No necesariamente tiene que ser todo exacto, pero sí un aproximado para no perder y no excedernos tampoco.
Ser honestos.
Si creemos que nuestro tiempo vale mucho, está perfecto.
Otros creen que los insumos o el local valen más.
Es muy personal, pero si uno se ORDENA, podemos partir de una base mucho más sólida para que nuestra cabeza esté tranquila de que el trabajo que estamos haciendo sea rentable para seguir manteniéndose en el tiempo. Seguir haciendo lo que nos gusta, con respeto y presencia.
Muchas gracias por llegar hasta acá.
Que siga la tinta.